Un reciente estudio realizado en Estados Unidos y Canadá indica que el acumulo en el cerebro de una proteína anómala denominada proteína beta-amieloide, se relaciona con la futura aparición de deterioro cognitivo aunque actualmente no se presenten síntomas.
Un total de 445 personas, de ambos sexos y con una media de edad de 74 años, fueron incluidas en el estudio. Inicialmente las personas fueron sometidas a unas pruebas para determinar las concentraciones de proteína beta-amielode en el cerebro y en líquido cefalorraquídeo (tomografía por emisión de positrones y punción lumbar). También se valoró que los participantes no presentaran signos de deterioro cognitivo mediante la práctica de varios test neuropsicológicos. Los participantes fueron divididos en dos grupos en función de si presentaban o no depósitos o concentraciones elevadas de proteína beta-amieloide (202 y 243 personas, respectivamente) y fueron seguidos durante un promedio de 3,1 años.
Aquellas personas con depósitos o niveles elevados de dicha proteína presentaron una evolución cognitiva (memoria y otras funciones) significativamente peor que los de grupo con niveles normales al inicio del estudio.
De todas formas, los investigadores sugieren que son necesarios más estudios y de mayor duración para sacar conclusiones definitivas.
La proteína beta-amieloide es un polipéptido constituido por 39 a 42 aminoácidos y que procede del metabolismo de una sustancia denominada proteína precursora del amieloide (PPA). La proteína beta-amieloide no se degrada y forma acúmulos sobre las neuronas que conducen a su muerte.